Laura Figueiredo nos desgranó todos los entresijos de esta ley, que establece la forma en la que se recuentan nuestros votos.
El método D’Hondt es el sistema que se utiliza para repartir los escaños o concejales entre las candidaturas de forma proporcional al número de votos obtenidos
Según este método, las candidaturas que no lleguen a un porcentaje mínimo de votos se descartan. En el caso de las elecciones generales este umbral es el 3% de los votos, en las elecciones locales el porcentaje mínimo es el 5%.
Las principales diferencias en la forma de votar son:
- El voto válido es aquel en el que se elige una papeleta y se sigue correctamente el procedimiento de votación.
- El voto nulo se produce cuando no se usan papeletas oficiales, se pintan o se escribe en ellas, se meten varias de candidaturas distintas o se incluyen en el sobre otros objetos. El voto no se da por válido y sale del recuento oficial de número de votaciones.
- El voto en blanco se produce cuando dentro del sobre no hay nada. Los votos en blanco sí se suman al recuento oficial.
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