QUÉ HACER EN CASO DE ACCIDENTE DE TRÁFICO

En la tarde del 6 de Noviembre, Aurelia Fuentes Bermejo, abogada, nos habló sobre un tema importante y a la vez interesante,  “QUÉ HACER EN CASO DE ACCIDENTE DE TRÁFICO”.

A lo largo de la charla nos dio consejos y recomendaciones a seguir en caso de tener un percance de este tipo.

Lo 1º es llamar al agente de nuestro seguro y comunicar lo ocurrido facilitando los datos que nos pida y siguiendo sus recomendaciones.

Otro aspecto esencial es recoger inmediatamente, en caliente, los datos de cualquier testigo que haya presenciado el accidente. Se pregunta a todo el mundo quién lo ha visto, si han visto a alguien que pudiera estar allí, que quién lo vio…parece que en ese momento, en el momento, es más fácil que las personas colaboren.

En 2º lugar, es muy importante identificar al otro vehículo y persona implicados, para ello se puede hacer uso del teléfono móvil fotografiando matrícula y situación de los vehículos implicados antes de que sean retirados de la vía pública por posible interrupción de la circulación.

Para esta recogida de datos se suele emplear el documento “Declaración Amistosa de Accidente” que nos ayuda para que no se nos olvide ningún dato importante, siendo conveniente cubrirlo aunque luego, por falta de acuerdo en el relato de los hechos, no se coincida con el implicado y no llegue a firmarse.

Es imprescindible una descripción de los hechos, relatar cómo sucedió, hacer un croquis y señalar los daños materiales y personales. En caso de daños personales hay que señalar siempre “víctimas”, aunque sea leve, porque no podemos prever la evolución que va a tener ese daño, si con el tiempo va a ser leve o muy grave.

Si no se está de acuerdo con el relato de lo sucedido no se firma, si hay acuerdo lo firman las dos partes  después de cubrir todo.

Nos cuenta Aurelia que existe mucha picaresca para cobrar de los seguros de forma fraudulenta, con simulaciones de golpes o atropellos, que ocasionan sustos y no menos disgustos a las personas previamente estudiadas por el impostor para simular estos accidentes. En estos casos nos recomienda hacer frente y decir en voz alta que se llama a la policía, ocurriendo normalmente que desaparezca la víctima corriendo en cuanto oye esto.

También señala que el Juicio de Faltas ha desaparecido desde 2015, era rápido, eficaz y económico, al que se podía ir si había un daño a una persona por un accidente, para ello se contaba con un médico forense que valoraba daños y secuelas y luego se realizaba el juicio. Ahora no se sabe cómo actuar, en caso de accidente leve, hay que ir a un perito médico y costearlo por cuenta de la víctima, antes el médico forense era gratis.

En la actualidad debido a la presión de compañías y otros interesados se han establecido unos baremos y tasas correspondientes a los daños. Cuando se fijan cuantías superiores las compañías apelan y se aplican los baremos públicos para estos accidentes. Es importante en este tema valorar por un perito médico si hay limitaciones de nuestra calidad de vida, para solicitar lo que corresponda.

Un inconveniente de este sistema es que no tienen en cuenta el agravamiento de problemas médicos previos, que los daños del accidente provocan, quedando sin indemnización este agravamiento, siendo muy notable en los alargamientos de dolencias, sobre todo en casos como los esguinces cervicales, que ni están bien definidos médicamente.

Otra recomendación importante es que se haga uso de la cláusula que tienen las compañías de seguros sobre el derecho a usar un abogado externo a la aseguradora, es más probable que nos consiga mejores condiciones de indemnización, que si es de la compañía que debe abonar eso. Esto es debido a que las compañías suelen tener un convenio por el cual, cada una paga a su asegurado, en lugar de cada una la del otro, si la aseguradora de los dos implicados es la misma lo normal es que tiren a la baja en lo que deben pagar, por ello es mejor recurrir a la asistencia jurídica de un abogado externo, no pueden obligarnos a usar el de la compañía, tenemos derecho a elegirlo.

Aurelia también nos aclaró que, en caso de seguro de daños a terceros,pagan los daños producidos por nuestra culpa a otras personas, pero no cubren los daños en nuestro coche, puesto que ha sido culpa nuestra.

Otra fórmula a utilizar es la Responsabilidad Civil Contractual.  Siendo aquí muy importante recopilar todas las facturas de gastos ocasionadas con motivo del accidente y hay que tener en cuenta que se tiene un año para reclamar desde el alta médica por el accidente.

En resumen: recoger todos los datos del otro coche y conductor implicado, también de algún testigo, cubrir la declaración amistosa y firmar si se está de acuerdo, además si lo creemos necesario reclamar bajo el asesoramiento externo a la compañía de nuestro seguro, de un abogado.